viernes, junio 28, 2013
Señor Ayudame!
Señor, ayúdame a decir la verdad, delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme elaplauso de los débiles.
OTRA NAVIDAD SIN FAMILIA!
Mi esposa y yo estábamos sentados a la mesa, los dos solos. En ese instante, no sé ni como, vinieron a mi mente recuerdos de mis padres.
Cuando era joven, durante las fiestas navideñas, tenía un montón de invitaciones para asistir a cenas y fiestas con mis amigos y aunque en casa también teníamos cenas especiales, yo siempre prefería asistir a esas reuniones con mis amigos en lugar de pasar la velada con mi familia.
Mi padre, siempre quiso que toda la familia, al menos el día de Navidad, estuviéramos juntos y por eso siempre nos decía, que dividiéramos las fechas. Que los que ya estaban casados, pasaran la fiesta del Año Nuevo en casa de sus suegros y que los solteros, la pasáramos con los amigos.
Lo único que nos pedía era que la Navidad la pasáramos con él y con mi madre.
¡Nunca le pudimos cumplir!
Mis hermanos ya casados, nunca pudieron. Siempre alegaron que la casa de mis padres estaba muy lejos de sus domicilios, que hacia mucho frío, que había nevado, en fin, siempre excusas.
Los solteros, siempre preferimos salir con los amigos para bailar, divertirnos y beber. ¡Siempre preferimos estar con otras personas, antes que con nuestros padres!
Nuestras atenciones y afectos siempre fueron para otras personas.
Una noche de diciembre, mi hermano mayor nos convocó a todos los demás, para hacernos saber, que deberíamos pasar más tiempo con nuestros padres, ya que nunca después de haberse casado los mayores, habíamos pasado una Navidad todos juntos.
Ahora con el tiempo, me doy cuenta que mi hermano estaba pasando por lo mismo que mis padres, ya que sus hijos mayores, empezaban a pasar estas fechas con sus amigos y él y su esposa se encontraron solos en Navidad. Todos estuvimos de acuerdo en que pasaríamos la Navidad, en casa de mis padres.
Al enterarse mis padres se pusieron muy felices. Mi padre le dijo a mi madre, que preparara una gran cena. En la casa todo era felicidad.
Mi padre se acercó y me dijo: –Estoy muy feliz hijo, porque por fin voy a tener a todos sentados en la mesa de nuestra casa, como cuando eran pequeños. Quiero ver a mi hijo el mayor sentado a mi derecha y a ti a mi izquierda por ser el más pequeño.
Tu madre estará en el extremo opuesto junto a tus hermanas. Estaba tan feliz y emocionado que me dio un abrazo tan lleno de amor que casi se me saltan las lágrimas.
Todo estaba listo. Eran las 19 horas y les dije a mis padres: –Voy a salir un momento para comunicarles a mis amigos que no pasaría Navidad con ellos, sino con mi familia.
Mi padre dijo: –Haces bien hijo, para que no te estén esperando y me dio una palmada en el hombro, mientras sonreía.
Cuando salí me esperaban dos de mis amigos a los que les comenté que me quedaría con mis padres, pero ellos insistieron en que por lo menos brindara con ellos, para que sintieran que yo estaba allí con ellos. Pero el brindis se fue alargando hasta casi la media noche. Todo el tiempo pensaba que mis hermanos y hermanas ya estarían en casa junto a mis padres, esperándome para empezar.
Por fin con un fuerte sentimiento de culpa por no haberme ido de inmediato, me retiré sin despedirme de mis amigos. Presentía que recibiría algún reproche por parte de mis hermanos y que todos estarían enojados conmigo.
Cuando iba acercándome a casa, me di cuenta que no oía voces, ni cantos, ni risas de parte de mi familia, pensé que por estar fría la noche se encontrarían en el interior de la casa con mis padres, así que entré por la puerta intentando ser discreto, pensando que si me preguntaban les diría que me había quedado dormido.
Cuando abrí la puerta no oí ningún ruido, sólo escuché la conversación de mi padre con una voz quebrada por el llanto diciéndole a mi madre: –No vino nadie, ni siquiera el menor de nuestros hijos que vive con nosotros, está aquí.
¿Qué hemos hecho con nuestros hijos que no quieren pasar con nosotros una noche tan especial? Somos sus padres, esta casa la construimos para ellos con todo nuestro amor, esfuerzo y trabajo. ¿Por qué no nos pueden dedicar un día? Si nosotros les dedicamos toda nuestra vida.
Se oía mucha tristeza en sus palabras, en ese momento no tuve valor suficiente para acercarme.
Seguí oyendo a mi madre que le contestó con unas palabras que aún retumban en mis oídos:
–No te preocupes, los padres tenemos que entender que sólo estamos en el pensamiento de nuestros hijos cuando son pequeños. Pero cuando crecen, ese pensamiento lo ocupan en otras cosas, como el colegio, sus tareas, la diversión, sus amigos, las fiestas y después en el noviazgo, el trabajo, la esposa y sus propios hijos.
Sus ocupaciones y preocupaciones son otras y nosotros no somos parte de ellas. Quédate tranquilo, todo lo que hicimos y les dimos fue por amor. ¿Tú crees que van a preferir pasar la noche de Navidad con un par de viejos que ya no pueden bailar, que ya no tienen gracia ni para hacerles reír y que se quejan por todo? ¡Anda, anímate…! ¡Mira, voy a poner los diez platos sobre la mesa y a medida que vayan llegando les iremos sirviendo!… ¡Quieres ayudarme?
Sentí un enorme nudo en la garganta que no me dejaba respirar, me sentí tan desagradecido, tan mal hijo, tan avergonzado, ¿Cuánto tiempo le he dedicado a otras personas y actividades nada importantes comparadas con mis padres? ¿Cuántas veces he dejado de abrazarlos, besarlos y decirles cuanto les amo?
Salí de donde estaba y abracé a mi padre y le pedí perdón, luego fui con mi madre, le besé sus manos y me arrodillé, ella me acariciaba los cabellos mientras mi padre se secaba las lágrimas y dándome la mano me sentó a su derecha y dijo: –No es necesario que estén todos, uno solo representa a los demás. «Vieja», sirve la cena. ¡Que nuestra familia ha llegado!
Hoy mis hijos no están conmigo y en mi mesa están los dos platos servidos, en cuanto llegue alguno, tan solo uno, entonces mi familia habrá llegado.
«Aprovecha a tus padres en vida. No los descuides, por lo menos no dejes de estar con ellos y
poder abrazarlos y decirles que les amas y agradéceles por todo lo que han hecho por ti»
lunes, junio 24, 2013
LA MADUREZ
Madurez es: saber controlar la ira y zanjar las diferencias sin violencia, sin destrucción.
Madurez significa paciencia. Es la libertad de saber rechazar un placer momentáneo en aras de una felicidad duradera.
Madurez es perseverancia y habilidad para llevar a cabo un proyecto a pesar de los obstáculos o fracasos.
Es la capacidad de enfrentarse a las desgracias, frustraciones, molestias y derrotas sin lamentaciones ni colapsos.
Madurez es humildad. Tener el valor de reconocer cuando se está equivocado.
Si la razón está de nuestra parte, no experimentar la satisfacción de decir "yo te lo advertí".
Madurez es tomar una decisión y sostenerla.
Madurez significa paciencia. Es la libertad . . .
La gente inmadura se pasa la vida explorando sin posibilidades, sin fin y termina por no hacer nada positivo.
Madurez significa cumplir con la palabra dada.
Las personas que carecen de ella son maestras en las disculpas, son aquellas que viven confusas, que se convierten en una condena de promesas rotas, de amistades pasajeras, de cosas y negocios sin terminar.
Madurez es el arte de vivir en paz con situaciones que no podemos cambiar o tener el valor de cambiarlas cuando las circunstancias así lo exigen.
¿No crees que ya es tiempo de madurar?
Madurez significa paciencia. Es la libertad de saber rechazar un placer momentáneo en aras de una felicidad duradera.
Madurez es perseverancia y habilidad para llevar a cabo un proyecto a pesar de los obstáculos o fracasos.
Es la capacidad de enfrentarse a las desgracias, frustraciones, molestias y derrotas sin lamentaciones ni colapsos.
Madurez es humildad. Tener el valor de reconocer cuando se está equivocado.
Si la razón está de nuestra parte, no experimentar la satisfacción de decir "yo te lo advertí".
Madurez es tomar una decisión y sostenerla.
Madurez significa paciencia. Es la libertad . . .
La gente inmadura se pasa la vida explorando sin posibilidades, sin fin y termina por no hacer nada positivo.
Madurez significa cumplir con la palabra dada.
Las personas que carecen de ella son maestras en las disculpas, son aquellas que viven confusas, que se convierten en una condena de promesas rotas, de amistades pasajeras, de cosas y negocios sin terminar.
Madurez es el arte de vivir en paz con situaciones que no podemos cambiar o tener el valor de cambiarlas cuando las circunstancias así lo exigen.
¿No crees que ya es tiempo de madurar?
jueves, junio 20, 2013
LA MUJER ES MARAVILLOSA
¿Qué hay de malo, en querer cuidar a una mujer, si ella te cuida a ti?
Las mujeres tienen fuerzas y capacidades que asombran a los hombres.
Ellas… se encargan de los niños, pueden sobrellevar penas y situaciones muy «pesadas», sin embargo tienen espacio para la felicidad… el amor y la alegría.
Ellas sonríen cuando quieren gritar, cantan cuando quieren llorar, lloran cuando están contentas y ríen cuando están nerviosas. Pero al mismo tiempo que tienen toda esa fortaleza interior, son capaces de esperar impacientes una llamada de teléfono de su esposo o de sus hijos, sólo para oír sus voces y saber que llegaron sanos.
Las mujeres tienen cualidades especiales, por eso siempre se ofrecen para buenas causas.
Son voluntarias en hospitales, llevan comida a los necesitados trabajan como niñeras amas de casa, abogadas y solucionan problemas entre niños y vecinos. Además se adaptan a lo que sea necesario por eso usan trajes, vaqueros, uniformes y minifaldas.
Las mujeres recorren largos caminos para conseguir la mejor escuela para sus hijos y la mejor atención para la salud de su familia.
Ellas no aceptan un «no» como respuesta cuando están convencidas de que hay una solución. Saben perdonar.
Son extremadamente sensibles e intuitivas y los hombres no acaban de entender por qué ríen o lloran ante un nacimiento o un matrimonio. Sin embargo hay más, esa sensibilidad e intuición también les permite saber que un abrazo, un beso y decir te amo en el momento oportuno, puede sanar un corazón dolido.
Una mujer puede lograr que una mañana, una tarde o una noche romántica sean inolvidables.
Las mujeres vienen en todos los tamaños, colores y formas; viven en casas, palacios o cabañas. Ellas corren, caminan, pueden usar un automóvil tanto como una computadora.
Las mujeres tienen mucho qué decir y mucho para dar. El corazón de las mujeres hace girar el mundo. Y a cambio, todo lo que ellas esperan es un abrazo, un beso o una caricia.
El amor que ella entrega apasionada e inocentemente al hombre a quien ama, es el mismo que le impulsa a cuidar a su amado cuando está enfermo o simplemente prepararle una taza de té en las frías noches de invierno.
La belleza de una mujer no está en la ropa que lleva, en su figura o en la forma en que se peina.
Si quieres descubrirla, tendrás que mirarla a los ojos, que es la puerta de su corazón, donde reside la esencia de su alma.
«Tienen que aprender a reconocer a una verdadera mujer cuando toque a sus puertas para que, así, no la dejen ir»
El equipaje
Un hombre que viajaba en avión hacia Singapur, cuando faltaban pocos minutos para aterrizar, se dio cuenta de que el joven que viajaba a su lado se estaba poniendo muy nervioso.
Pensó que posiblemente no estaba muy acostumbrado a viajar y que tenía cierto temor al aterrizaje. Pero de pronto el joven se dirigió a él y le preguntó: –¿Es cierto que en este país las personas que son descubiertas pasando droga las ahorcan? –¡Efectivamente! le respondió, en este país si encuentran a alguien con droga, la pena que les imponen es morir ahorcado.
El muchacho se calló durante unos segundos. De pronto se levantó y se fue al servicio. Después de unos minutos, regresó a su asiento, pero tenía una mirada distinta, una mirada de alivio.
El hombre, suponiendo lo que había ocurrido, le preguntó: –¿Te has deshecho de todo lo que llevabas encima y que te ponía en peligro? El joven lo miró avergonzado y dijo: -Sí Señor, pero por favor, no se lo diga a nadie.
El hombre, suponiendo lo que había ocurrido, le preguntó: –¿Te has deshecho de todo lo que llevabas encima y que te ponía en peligro? El joven lo miró avergonzado y dijo: -Sí Señor, pero por favor, no se lo diga a nadie.
Al llegar a Singapur la policía retuvo al joven para inspeccionarle el equipaje y hacerle un control rutinario. Afortunadamente para él, ya se había deshecho con anterioridad de todo el equipaje no permitido en ese país.
Durante nuestra vida vamos llenando nuestro equipaje de hábitos, costumbres, creencias, valores y fundamentos que, además de cargarnos en exceso, son peligrosos y contrarios a la voluntad de Dios. Eso nos pone muchas veces en aprietos, nos causa vergüenza, confusión y siempre acaba por afectar nuestra vida y la de los que nos rodean de una manera negativa y casi siempre destructiva.
Durante nuestra vida vamos llenando nuestro equipaje de hábitos, costumbres, creencias, valores y fundamentos que, además de cargarnos en exceso, son peligrosos y contrarios a la voluntad de Dios. Eso nos pone muchas veces en aprietos, nos causa vergüenza, confusión y siempre acaba por afectar nuestra vida y la de los que nos rodean de una manera negativa y casi siempre destructiva.
¿Estás llevando algún equipaje del que necesitas deshacerte antes de que te cause más problemas?
lunes, junio 17, 2013
El secreto para lograr amor y felicidad
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¿Cuál es el secreto para que logres el amor y la felicidad? Si quieres felicidad, dale felicidad a otros; si quieres amor, aprende a amar a los demás; si quieres atención y aprecio, aprende a dar atención y aprecio; si quieres abundancia material, ayuda a otros a tener abundancia.De hecho, la manera más fácil de obtener lo que quieres es ayudando a otros a obtener lo que quieren. Este principio opera para individuo, corporaciones, sociedades y naciones. Si quieres ser bendecido con todas las cosas buenas en la vida, aprende a bendecir silenciosamente a todos con las cosas buenas en la vida. Hasta pensar en dar, pensar en bendecir, o una simple oración tiene el poder de influir a los demás. El pensamiento tiene el poder de transformación. Cuando aprendes a dar aquello que buscas, activas y montas la coreografía de la danza con movimientos exquisitos, energéticos y vitales que constituyen el eterno palpitar de la vida. La mejor manera de poner en operación la Ley del Dar y poner todo el proceso en circulación es tomar la decisión de que en cualquier momento que entres en contacto con otra persona le darás algo. No tiene que ser algo material; puede ser una flor, un cumplido o una oración, de hecho, las formas más poderosas de dar no son materiales. Los regalos de cuidados, atención, afecto, aprecio y amor son algunos de los regalos más preciosos que puedes dar, y no cuestan nada. Cuando conoces a alguien, puedes silenciosamente enviarle una bendición, deseándole felicidad, alegría y dicha. Esta manera de dar silenciosamente es muy poderosa. Podrías decir "¿Cómo puedo darles a otros en este momento cuando no tengo suficiente para mi"? Puedes llevar una flor. Puedes llevar una tarjeta que diga algo sobre los sentimientos que tienes por esa persona a la que estás visitando. Puedes llevarle un cumplido. Puedes llevarle una oración. Toma la decisión de dar a dondequiera que vayas, a quien sea que visites o veas. Siempre y cuando estés dando, estarás recibiendo. Entre más das, adquirirás más confianza en los efectos milagrosos de esta ley. Al recibir más, tu habilidad de dar más también aumentará. |
PAPA OLVIDA
(Bellla reflexion)
Escucha, hijo: voy a decirte esto mientras duermes, una manecita metida bajo la mejilla y los rubios rizos pegados a tu frente humedecida.
He entrado solo a tu cuarto. Hace unos minutos, mientras leía mi diario en la biblioteca, sentí una ola de remordimiento que me ahogaba. Culpable, vine junto a tu cama.
Esto es lo que pensaba, hijo: me enojé contigo.
Te regañé porque no te limpiaste los zapatos. Te grité porque dejaste caer algo al suelo.
Durante el desayuno te regañé también. Volcaste las cosas. Tragaste la comida sin cuidado.
Pusiste los codos sobre la mesa. Untaste demasiado el pan con la mantequilla. Y cuando te ibas a jugar y yo salía a tomar el tren, te volviste y me saludaste con la mano y dijiste: “¡Adiós, papito!” y yo fruncí el entrecejo y te respondí: “¡Ten erguidos los hombros!”
Al caer la tarde todo empezó de nuevo. Al acercarme a casa te vi, de rodillas, jugando en la calle. Tenías agujeros en las medias. Te humillé ante tus amiguitos al hacerte marchar a casa delante de mí.
Las medias son caras, y si tuvieras que comprarlas tú, serías más cuidadoso. Pensar, hijo, que un padre diga eso.
¿Recuerdas, más tarde, cuando yo leía en la biblioteca y entraste tímidamente, con una mirada de perseguido? Cuando levanté la vista del diario, impaciente por la interrupción, vacilaste en la puerta.
“¿Qué quieres ahora?”, te dije bruscamente.
Nada respondiste, pero te lanzaste en tempestuosa carrera y me echaste los brazos al cuello y me besaste, y tus bracitos me apretaron con un cariño que Dios había hecho florecer en tu corazón y que ni aun el descuido ajeno puede agotar.
Y luego te fuiste a dormir, con breves pasitos ruidosos por la escalera.
Bien, hijo: poco después fue cuando se me cayó el diario de las manos y entró en mí un terrible temor. ¿Qué estaba haciendo de mí la costumbre?
La costumbre de encontrar defectos, de reprender; ésta era mi recompensa a ti por ser un niño. No era que yo no te amara; era que esperaba demasiado de ti. Y medía según la vara de mis años maduros.
Y hay tanto de bueno y de bello y de recto en tu carácter. Ese corazoncito tuyo es grande como el sol que nace entre las colinas.
Así lo demostraste con tu espontáneo impulso de correr a besarme esta noche. Nada más que eso importa esta noche, hijo.
He llegado hasta tu camita en la oscuridad, y me he arrodillado, lleno de vergüenza.
Es una pobre explicación; sé que no comprenderías estas cosas si te las dijera cuando estás despierto.
Pero mañana seré un verdadero papito. Seré tu compañero, y sufriré cuando sufras, y reiré cuando rías. Me morderé la lengua cuando esté por pronunciar palabras impacientes. No haré más que decirme, como si fuera un ritual: “No es más que un niño, un niño pequeñito”.
Temo haberte imaginado hombre.
Pero al verte ahora, hijo, acurrucado, fatigado en tu camita, veo que eres un bebé todavía. Ayer estabas en los brazos de tu madre, con la cabeza en su hombro.
He pedido demasiado, demasiado…
viernes, junio 14, 2013
EL AMOR ES COMO UN NIÑO
Para mi el amor es como un niño que juega a las escondidas, tu tienes que buscar y buscar en varias personas a ver en donde se escondió, muchas veces piensas que ya lo encontraste y te das cuenta de que no era el amor quien estaba escondido en esa persona, sino que era la amistad disfrazada de amor.
También el amor puede ser que el amor este escondido en la persona que escogiste como pareja, pero resulta que el amor se cansó de ese escondite y decide buscar otro, pero por la costumbre te quedas con esa persona, no por amor, sino por costumbre, por esto vemos algunas parejas que se mantienen unidas por mucho tiempo pero que realmente no están enamoradas.
Lo que si te puedo asegurar es que cuando uno encuentra el escondite del amor y le va haciendo cálida la estadía en ese escondite, con besos, cariños, cuidados y atención, el amor no querrá irse de ese escondite y ya deja de ser escondite y se convierte en su hogar.
Por eso cuando creas encontrar el amor cuídalo para que no se te vuelva a esconder.
jueves, junio 13, 2013
Según estudios científicos, los síntomas del enamoramiento, podrían compararse con los que provocarían una dosis de droga en el organismo.
Cuando nos enamoramos, ocurren en nuestro cuerpo una serie de reacciones químicas provocadas por la revolución de las hormonas. Grandes cantidades de estrógenos, testosterona, dopamina, oxitocina y otros neurotransmisores, fluyen en nuestro interior provocando los característicos síntomas del enamoramiento.
De esta manera, el cerebro produce entre otros compuestos feniletilamina, proveniente de la familia de las anfetaminas, que provocan esa sensación de excitación y de hiperactividad casi permanente en los enamorados.
Según afirman los expertos: “el amor puede afectar a los circuitos cerebrales y adormecer las neuronas asociadas al sentido crítico”, esto de alguna manera explica el hecho de que no veamos los defectos de la otra persona durante laetapa del enamoramiento, pero que luego las diferencias suelen aflorar cuando la misma haya pasado.
Los síntomas del enamoramiento incluyen: taquicardia, nerviosismo, aumento de la presión arterial, pensamientos obsesivos que tienen como objeto a la otra persona, poca capacidad de concentración en la tareas, insomnio, pérdida de apetito, entre otros.
Las típicas mariposas en el estómago que se dicen sentir cuando estamos en presencia de la persona de la cual estamos enamorados, o el hecho de no poder quitar de nuestros pensamientos a la persona amada, son algunas de las pautas que nos revelan que efectivamente estamos atravesando la etapa de enamoramiento.
Sabemos que esta dulce pero revolucionada etapa, no dura para siempre, y como suele pasar, se extingue pasado unas cuantas semanas o pocos meses, para que si todo en la relación de pareja prospera, dar paso a una etapa aún mucho mejor pero también más calma: la etapa en donde se consolida el amor.
Los científicos van más allá, y afirman que si la etapa de enamoramiento dura más de seis meses, podría llegar a transformarse en un amor patológico y hasta podría provocar alteraciones mentales. Exagerado o no, lo cierto es que cuando se entra en la etapa de enamoramiento, podemos llegar a cometer varias locuras.
Los síntomas del enamoramiento son muy similares en todas las personas, algunas lo podrán experimentar en forma más intensa que otras, dado la diferencia en las personalidades, pero seguramente cuando te enamores, podrás sin dudas, identificar este maravilloso y placentero estado.
Tú, ¿cómo te has dado cuenta que te has enamorado?
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Diario de vida de un perro
Muy bonita y conmovedora a la vez u.u
1 mes: Mi mamá me cuida muy bien. Es una mamá ejemplar.
2 meses: Hoy estoy triste, me separaron de mi mamá. Ella, me dijo adiós, con los ojos, deseándome que mi nueva "familia humana" me cuidara tan bien como ella.
4 meses: Todo me llama la atención. Los niños de la casa son como mis hermanitos, me jalan la cola y yo los muerdo jugando.
5 meses: Hoy me regañaron. Mi ama se molestó porque me hice pipí en la casa, pero nunca me enseñaron donde debo hacerlo. Además, duermo en el cuarto... ¡ya no me aguantan!
8 meses: ¡Soy feliz! Tengo el calor de un hogar, me siento querido y protegido. Creo que mis amos me quieren: cuando están comiendo me convidan. El patio es para mi sólito. Nunca me educan. Ha de estar bien todo lo que hago.
12 meses: Hoy cumplí un año. Mis dueños dicen que crecí más de lo que ellos pensaban. ¡Que orgullosos estarán de mí!
13 meses: ¡Que mal me siento!.. Mi hermanito me quito la pelota, así que se la quité, pero mis mandíbulas se han hecho muy fuertes y lo lastimé sin querer. Por eso me encadenaron, casi sin poder moverme; al sol. Dicen que me van a tener en observaciones y que soy muy ingrato. No entiendo nada.
15 meses: Ya nada es igual... vivo en la azotea sin techo y cuando llueve me mojo. Me siento muy sólo... mi familia ya no me quiere. A veces se les olvida que tengo hambre y sed.
16 meses: Hoy me bajaron de la azotea, pensando que me habían perdonado, salté de la alegría. Encima de eso. Me llevaron con ellos de paseo. Nos enfilamos por una carretera y de pronto se pararon. Abrieron la puerta y yo me baje feliz. Rápidamente cerraron la puerta y se fueron... ¡Espérenme, Ladré... se olvidan de mí... Corrí detrás del auto con todas mis fuerzas. Mi angustia crecía al darme cuenta que ME HABÍAN ABANDONADO.
17 meses: He tratado en vano de regresar a casa. Encuentro gente buena que me ve con tristeza y me da algo de comer. Yo les agradezco desde el alma con la mirada. Quisiera que alguien me adoptara, pero sólo dicen "pobre perro", se habrá perdido.
18 meses: Hace unos días pase por una escuela y un grupo de niños riéndose, me lanzó una lluvia de piedras, una de ellas me lastimó un ojo y desde entonces no veo por él.
19 meses: Parece mentira, cuando estaba más bonito se compadecían de mí. Ahora que estoy flaco, sucio y perdí un ojo la gente más bien me saca a escobazos cuando busco refugio.
20 meses: hoy en la calle un carro me arrolló. Creí estar en un lugar seguro llamado "cuneta", pero nunca olvidaré la cara de satisfacción del conductor, que hasta se desvío para pegarme. Ojalá me hubiera matado, pero sólo me dislocó la cadera. El dolor fue terrible, mis patas traseras no me responden y con dificultad me arrastré a un costado del camino. Tengo diez días bajo el sol, la lluvia, y sin agua ni comida. Ya no me puedo mover. El dolor es insoportable. Me siento muy mal... ya casi estoy inconsciente; pero la dulzura de una voz me hizo reaccionar. "Pobre perro", decía..., junto a ella había un señor, que dijo: "Lo siento. Este perro no tiene remedio, es mejor que deje de sufrir". Ella asintió con lágrimas en los ojos. Como pude, moví mi cola y la miré agradeciéndole me ayudara a descansar. Sólo sentí el pinchazo de la inyección y me dormí para siempre pensando para que tuve que nacer si nadie me quería.
SABIAS QUE ESTA DE MODA EL MAQUILLAJE AL ESTILO "LOS 80"?
Como hacerlo? aqui te dejo unos sencillos pasos:
1. El maquillaje del rostro siempre comienza con la aplicación de base para uniformizar nuestra piel y prepararla para los productos. Aplícate un poco de base líquida en toda la cara, y si quieres también corrector para ocultar manchas, granitos o imperfecciones.
2. No debe faltarte blush o rubor colorado sobre tus pómulos. En esta época se usaba mucho el colorete rojo y rosa, no como ahora que se tiende hacia lo más natural posible.
3. El delineado no puede estar ausente, ¿verdad? Toma un lápiz delineador espeso de color negro (o del color que quieras, todo vale) y delinea los bordes inferiores y superiores de tus ojos. ¡Procura que la línea quede bien gruesa!
4. En la elección de los colores para las sombras de ojos es que viene el toque transgresor de los 80. Esta época se caracterizó por reunir un montón de colores: por ejemplo, puedes lucir sombras de verde y púrpura combinados, pero no las tonalidades más neutras que encuentres... Si quieres un verdadero look de los años 80 tienes que animarte a los colores brillantes.
5. Para terminar, aplica dos capas de máscara para dar volumen y longitud a tus pestañas. Si quieres darle a un más impacto, antes utiliza un rizador de pestañas para darles forma.
6. Y por ultimo y el toque estrella: Nada mejor que un lápiz labial rojo o rosa con brillo.
Atrevete!! te veras hermosa!
miércoles, junio 12, 2013
TIERNOS DELFINES para tu muro, solo comparte
Hermosos! y Muy inteligentes! :D
Los delfines cuentan con una gran cantidad de características que les ayudan a cazar y a sobrevivir. En la cabeza se encuentra algo conocido como melón. Esto le ayuda al delfín a usar su ecolocalización, una habilidad de todas las especies de delfines que se cree que cuentan con ella. Esto les ayuda a cazar peces aunque estén muy lejos para ser vistos. Los delfines tienen cerebros grandes, lo que los hace uno de los animales más inteligentes del mundo. Los delfines también cuentan con un sentido agudo de la vista dentro y fuera del agua.
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♥BIENVENIDOS♥
♥BIENVENIDOS♥ ¿Por qué cerramos los ojos cuando besamos? Cuando lloramos? O cuando soñamos?Porque,las cosas más hermosas no se ven, se sienten en el corazón.